Para nadie es un secreto que en la vida laboral debemos enfrentar grandes retos, en donde se ven directamente afectados tanto la mente como el cuerpo. Por lo que es necesario realizar ejercicios de relajación antes, durante o después de una jornada laboral, conocidos como pausas activas en el lugar de trabajo.
Te invitamos a conocer este tema a profundidad, además te dejaremos algunos ejemplos sumamente útiles y efectivos. ¡Vamos a por ello!
¿Qué son las pausas activas en el lugar de trabajo?
Una pausa activa o gimnasia laboral es aquel espacio o tiempo que se toma dentro de la jornada laboral, el cual se destina a la realización de una serie de rutinas de ejercicios, sobre todo de relajación, con el fin de prevenir lesiones, fatiga o tensión acumulada por el desarrollo de las labores diarias dentro de la empresa.
En otras palabras, se puede decir que las pausas activas son breves descansos tomados durante la jornada laboral, para realizar diversos ejercicios que ayudan a recuperar la energía, mejorar la eficiencia y el desempeño.
Beneficios de hacer pausas activas en el trabajo
Realizar pausas activas laborales puede ayudar a combatir el cansancio y mejorar la concentración. Algunos beneficios incluyen:
- Previene lesiones musculares.
- Mejoran la postura.
- Disminuyen la tensión muscular.
- Permiten recuperar la atención y concentración.
- Reduce el estrés.
- Reduce la sensación de fatiga o cansancio.
Estas pausas se pueden realizar en cualquier momento, aunque se debe evitar hacerlas una vez aparezca la fatiga muscular. Por lo que es muy recomendable hacerlas a mitad de la jornada.
¿Quiénes debes realizar pausas activas?
Estas pausas se vuelven indispensables para aquellas personas que realizan toda su jornada laboral sentadas frente a un computador, las que deber estar muchas reuniones durante el día, contestando teléfono, transcribiendo documentos, entre otras tareas de índole repetitivo; es decir, aquellas personas que realicen labores continuas por más de dos horas.
También aplica para aquellas personas cuyos trabajos implican una postura bípeda o de pie prolongada. Entre algunas profesiones por ejemplo:
- Oficinistas
- Enfermeras
- Maestros
- Conductores de autobús
- Repartidores
- Cajeros
- Farmacéuticos
- Dentistas
- Veterinarios
- Abogados
¿Por qué es importante realizar pausas activas en el lugar de trabajo?
Como dijimos en el apartado anterior, este tipo de actividad se vuelve necesaria en aquellas labores en donde el personal permanece mucho tiempo realizando una misma actividad.
Y como bien es sabido, para casi todo lo que hacemos están involucrados los músculos, los cuales al permanecer estáticos por muchas horas, puede que se acumulen desechos tóxicos que producen cansancio y fatiga; produciéndose dolencias generalmente en las áreas del cuello, hombros, piernas y pies, que a la larga puede desencadenar a enfermedades considerables.
De allí, la importancia o la necesidad de realizar pausas activas en el lugar de trabajo. Esto ayudará a que los músculos se relajen y se vuelva a tener la suficiente energía para continuar.
¿Quiénes no deben hacer pausas activas?
Aunque en la mayoría de los casos se vuelve necesario hacer ese tipo de pausas, algunas personas no deben hacerlas, como por ejemplo, aquellas que sufren de lo siguiente:
- Hipoglicemia.
- Fracturas aún latentes.
- Personas que sufren de hipertensión.
- Personas que sufran de enfermedades óseas o musculares graves.
¿Qué se debe tener en cuenta al momento de realizar estas pausas activas?
- Para hacer los ejercicios eficazmente se debe prestar atención a la respiración. Esta, debe ser profunda, lenta y rítmica.
- Antes de realizar el estiramiento se recomienda hacer ejercicios para mover y aflojar las articulaciones.
- Realizar conscientemente los ejercicios para determinar con exactitud cuáles son los músculos y articulaciones afectadas que necesitan de una relajación.
- Realizar el estiramiento de forma adecuada para no llegar a sentir dolor.
- Elegir hacer primero aquellos ejercicios que permita relajar las áreas que se sientan más cansadas
- Hacer los ejercicios suavemente.
Ejercicios para hacer durante una pausa activa en el lugar de trabajo
1. Girar la cabeza en ambos lados. Procura que por cada movimiento, el mentón quede en la misma dirección del hombro. Mantén la postura por 3 minutos en cada lado. Repite tres veces.
2. Inclinar la cabeza hacia atrás. Mantén la posición por 5 segundos y luego regresa al centro. Posteriormente baja la cabeza en dirección al suelo y mantén por 5 segundos. Repite tres veces.
3. Levantar los hombros hacia las orejas. Mantén esta posición por 10 segundos y luego suelta. Repite tres veces.
4. En posición de pie, separa las piernas e inclina las rodillas. Estira los brazos hacia abajo todo lo que el tronco te lo permita. Repite tres veces.
5. De pie, subir la rodilla de una de las piernas hasta la altura del pecho. Con ayuda de las manos sostenla por 10 segundos. Repite el ejercicio tres veces por cada pierna.
6. Realizar movimientos circulares en ambos tobillos. De 10 a 15 giros por cada tobillo.
7. Estirar los brazos hacia el frente. Junta las manos y manteniendo los brazos al frente, muévelos hacia abajo y hacia arriba. Haz ese ejercicio por 10 segundos. Repite 3 veces.
Como los ejercicios mencionados existen muchos otros que puedes realizar durante las pausas activas en el lugar de trabajo. Recuerda que esta tarea no es opcional, si realmente quieres rendir y sentirte bien física y mentalmente durante tu jornada laboral.